Concierto 4
Rondo para órganos
El alma que a Dios quiere. Seguidillas a dúo
Motete al Santísimo a solo. Gradual a solo
Mercedes Ruiz, violonchelo
Irene Roldán, clave, órgano y dirección musical
Voces femeninas del Coro de la AAOBS
Sopranos I
María Asensio
Soraya Méncid (solo)
Kenia Murto
Sopranos II
Marta Benítez
Luz Gutiérrez
Sara López de Haro (solo)
Altos
Clara Arrebola
Irene Roldán, clave, órgano y dirección musical
Irene Roldán, clavecinista sevillana, inicia su formación musical a los cuatro años con el piano, y pronto desarrolla una profunda pasión por el clave y la música antigua. Tras completar sus estudios iniciales en Sevilla y Salamanca con Ana Moreno y Pilar Montoya, se traslada a los Países Bajos a los diecinueve años para continuar su formación en los conservatorios de La Haya y Ámsterdam, bajo la guía de Jacques Ogg y Menno van Delft. Durante esta etapa formativa fue galardonada en dos ocasiones (2018 y 2020) con la beca de la Asociación de Amigos de la Orquesta Barroca de Sevilla.
Posteriormente, realiza un Máster en Clave y un Máster especializado en Bajo Continuo y Dirección desde el clave (Maestro al Cembalo) en la Schola Cantorum Basiliensis (Suiza), donde estudia con Andrea Marcon y Jörg-Andreas Bötticher, graduándose en ambas especialidades con las máximas calificaciones. Desde 2024 trabaja como clavecinista acompañante en dicha institución.
Su proyección internacional se consolida en 2021, cuando obtiene el Primer Premio —nunca antes concedido— y el Premio del Público en el III Concurso Internacional de Clave «Città di Milano». Ese mismo año, su conjunto de cámara Flor Galante es galardonado con el Primer Premio en el IV Concurso Internacional Bach de Berlín. En 2022, Irene recibe el prestigioso Premio Bach y un premio especial en el XXXIII Concurso Internacional Bach de Leipzig.
Como solista, ha actuado en destacadas salas y festivales europeos, como el Festival de Música Antigua de Utrecht, Festival de Música Antigua de Sevilla (FEMÁS), Urbino Musica Antica, Mars en Baroque, Fundación Juan March, Roma Festival Barocco, etc. Ha compartido escenario como solista con intérpretes de renombre como Maurice Steger, Jacques Ogg y Alfredo Bernardini, y ha sido invitada tanto como solista como continuista por prestigiosas formaciones como La Cetra Barockorchester Basel, Orquesta Barroca de Venecia, Kammerorchester Basel, Voces Suaves, Orquesta Barroca de Sevilla, Syntagma Amici, La Centifolia o Castello Consort, entre otras.
Apasionada de la ópera barroca, en 2024 fue asistente musical de Andrea Marcon en la producción de Alcina de Haendel en el Teatro de la Maestranza de Sevilla.
En los últimos años, Irene ha centrado su investigación en la música española de los siglos XVI al XVIII, con especial atención a la obra del compositor sevillano Francisco Correa de Arauxo, así como a Scarlatti y sus contemporáneos. Este interés ha cristalizado en su primer álbum en solitario, Scarlatti & Beyond, publicado en abril de 2025 con Passacaille Records.
Soraya Méncid, soprano
Actual ganadora del primer premio del Concurso Internacional Nuevas Voces Ciudad de Sevilla, la soprano Soraya Méncid se tituló en el CSM de Sevilla de la mano de la soprano Rosa de Alba y ha podido nutrirse de grandes profesionales de la talla de C. Bayón, C. Mena, C. Aragón, V. Genaux, C. Aransay, R. Estrada o P. Pelucchi, entre otros. Amplía su formación operística en Italia donde, perfecciona la técnica del belcanto en el conservatorio fiorentino Luigi Cherubini y en la prestigiosa Accademia de Belcanto Rodolfo Celletti, guiada por figuras como S. Lowe, N. Cok o M. Martello.
Ha sido integrante del Coro del Teatro de la
Maestranza e interpreta roles protagónicos en diversas obras llevadas a cabo por la Compañía Sevillana de Zarzuela.
Galardonada y finalista en diferentes concursos nacionales e internacionales, destaca por su versatilidad en el escenario, abordando repertorios, tanto camerísticos como operísticos, del mundo clásico y de la música antigua. En esta última resalta su interpretación del rol de Agua en “Los elementos” de Literes junto a Forma Antiqva, así como su participación en “The fairy Queen” y en el repertorio de Bach en la Academia Barroca del Festival de Granada, junto a Carlos Mena, Aarón Zapico y Rita Cosentino.
Integrante de dos producciones del Proyecto Zarza en los papeles de Telefonista y Sequía, desarrolla sus habilidades interpretativas nutriéndose a su vez del trabajo en musicales como “El fantasma de la Ópera” (Christine), “Germinal. El musical” (Catherine) y “El Médico. El musical” (ensemble), en sus giras sinfónicas.
Dentro del recital, destaca su gira con JJMM, así como la interpretación en las localidades estadounidenses de Washington DC y Hammond, Louisiana (Spanish Young Music Talent’s Program) y su participación en las ediciones XXV y XXVI del ya emblemático Ciclo Noches en los Jardines del Real Alcázar.
Notas al programa
El convento de Santa Clara de Sevilla, también llamado Real Monasterio de Santa Clara, es uno de los edificios religiosos más importantes de la capital hispalense. Desde su fundación en 1289, acogió a numerosas monjas clarisas que vivieron en la clausura del convento y procedían de todos los estamentos sociales. La institución destaca todavía hoy por sus tallas, frescos, pinturas y azulejos, que han sido estudiados por Gloria Centeno, y un gran patrimonio arquitectónico recién restaurado. Aunque hasta ahora más olvidada, la música es parte integrante de este patrimonio excepcional.
El convento fue un importante centro musical en Sevilla entre los siglos XVIII y XIX. Además del órgano del coro bajo, construido en 1800 por el organero sevillano Antonio Otín, ha llegado hasta nuestros días un considerable fondo de partituras formado por 1.482 manuscritos e impresos musicales, en su mayor parte fechables entre mediados del siglo XVIII y finales del XIX. Existió, pues, una intensa actividad musical que, a pesar de la clausura, estaba en constante evolución y recibía obras de otros grandes centros musicales españoles e internacionales. Entre las partituras conservadas, destacan dos grandes bloques con piezas únicas que se recuperan en este concierto. En primer lugar, una gran cantidad de música vocal religiosa, lo que lo convierte en uno de los principales fondos musicales religiosos para voces femeninas anterior a las desamortizaciones conventuales del siglo XIX. En segundo lugar, el gran número de obras para tecla, ya sea clave, órgano o pianoforte, demuestra que el convento acogió a monjas que sentían predilección por interpretar y escuchar este tipo de música más allá del repertorio estrictamente litúrgico.
El programa del presente concierto se ha realizado con una selección de obras representativas de estos dos bloques. En la parte dedicada a la música vocal, hemos planteado una recopilación que muestra las prácticas litúrgico-musicales sevillanas del siglo XVIII. La selección evidencia la posición privilegiada del convento en Sevilla, pues los principales compositores de la ciudad escribieron expresamente para la institución. Son obras en su mayoría compuestas originalmente para que las cantaran las propias monjas, muchas de ellas procedentes de buenas familias, en cuyo seno habían recibido una excelente formación musical. Se ha recuperado una Misa a tres voces de José Blasco de Nebra, organista segundo de la catedral y padre del famoso teclista y compositor Manuel Blasco de Nebra. Bajo una aparente sencillez, la obra presenta una equilibrada combinación de estilo severo y de encanto melódico que le confiere un sorprendente aire de modernidad. De su colega en la catedral hispalense, el maestro de capilla Domingo Arquimbau, se interpretarán un gradual para voz sola y órgano obligado para el día de San José y un motete para voz sola y bajo continuo dedicado al Santísimo Sacramento. De la buena reputación musical de Arquimbau, que nació en Girona y se formó en la catedral de Barcelona, da fe su nombramiento como miembro honorario de la Academia Filarmónica de Bolonia en 1815. De otro prestigioso compositor, el organista de San Pedro el Real Joaquín Montero, se han seleccionado dos obras a dos voces, un motete para la fiesta de San Francisco de Asís, fundador de la rama masculina de la orden, y unas seguidillas «a lo divino» para el tiempo pascual que aportan movimiento y expresividad al programa.
El fondo es especialmente rico en música para tecla inédita. Una de sus joyas es la Sonata para tecla en Fa menor de Manuel Blasco de Nebra, descubierta en la última catalogación del fondo y desconocida hasta hoy. De estilo compositivo similar a las de la colección de sonatas Opus 1 del compositor, publicada en Madrid en 1780, la obra se abre a sonoridades sensibles y prerrománticas. De Joaquín Montero, uno de los autores mejor representados en la biblioteca musical del convento, se ha seleccionado un rondó inédito, escrito en un estilo galante de aires cosmopolitas. Finalmente, se ha escogido un interesante díptico formado por un Allegro introductorio y una elaborada Fuga en Re mayor. De autoría desconocida, esta obra es representativa de la recepción en Sevilla de un repertorio «serio» de origen germánico, que inscribe al convento en un espacio de circulación musical a escala europea. Esta pieza y la de Montero proceden de un cuaderno para tecla con obras de compositores locales, pero también portugueses, italianos y alemanes, que perteneció a la aristócrata sevillana María del Patrocinio Chacón-Manrique de Lara y Carrillo de Albornoz (1779-1852). Su hermana Manuela (nacida en 1766) fue monja del convento de Santa Clara, lo que explicaría la presencia del libro en la institución. Manuela fue una cantante destacada, como sugieren las obras del fondo dedicadas a ella, y muy probablemente participó en la interpretación de las obras vocales elegidas para este programa. Una tercera hermana, María del Carmen (1772-1860), presidenta de la Junta de Damas de las Sociedades Económicas de Amigos del País de Granada y Madrid, muestra la plena inscripción de las mujeres de la familia en las nuevas sociabilidades ilustradas del cambio de siglo XVIII al XIX. La música del convento de Santa Clara, lejos de presentarlo como un espacio aislado del mundo, muestra que los conventos femeninos del Antiguo Régimen eran espacios de agencia femenina inscritos en redes de circulación cultural de ámbito español y europeo.
Antonio Soriano Santacruz
Lluís Bertran
Águeda Pedrero Encabo
El fondo musical del fondo de Santa Clara fue donado al Instituto Complutense de Ciencias Musicales en 2001 y se conserva actualmente en depósito en la Biblioteca Histórica de la Universidad Complutense de Madrid. Ha sido catalogado gracias a la iniciativa de la profesora Cristina Bordas y a la colaboración de numerosos estudiantes de musicología de la Universidad Complutense de Madrid. Han investigado y publicado sobre este fondo la propia Cristina Bordas, José María Domínguez, José Antonio Gutiérrez Álvarez, Fernando Calonge, Carlos Escribano, Diego González, Antonio Soriano Santacruz y Águeda Pedrero Encabo.
Las ediciones críticas de las obras del programa han sido preparadas por Águeda Pedrero Encabo (Universidad de Valladolid), Antonio Soriano Santacruz y Lluís Bertran (Instituto Complutense de Ciencias Musicales).
La recuperación de estas obras es parte del proyecto, liderado por el ICCMU, Espacios, géneros y públicos de la música en Madrid (PHS-2024/PH-HUM-194 MadMusic CM), financiado por la Comunidad de Madrid, Dirección General de Investigación e Innovación Tecnológica, con las ayudas a proyectos de I+D en Procesos Humanos y Sociales Orden 5696/2024, de 10 de diciembre, de la Consejería de Educación, Ciencia y Universidades.